Aunque por manido no deja de ser cierto, no es pan comido ganar un partido en Primera. Bien lo sabe el Espanyol, que estuvo a punto de caer en el RCDE Stadium ante el Levante (4-3), ganó por solo un tanto frente el Alavés (1-0) y cayó con estrépito, más por las formas que por el resultado, en Getafe (2-1). Ahora el Elche, en zona de descenso, amenaza el fortín de Cornellà-El Prat. Tiene argumentos, y un dato al que agarrarse.
Su entrenador Francisco Rodríguez, que llegó en sustitución de Fran Escribà, tiene unos números espectaculares ante los pericos. Es el equipo que se le da mejor, solamente con una derrota (14%), tres empates y tres victorias, o lo que es lo mismo, ha sumado 12 de 21 puntos siempre dirigiendo a conjuntos con menor presupuesto y recursos que los blanquiazules. Un dato a tener en cuenta.
Formado, aunque fuera una temporada, en el fútbol base del Espanyol, después de su etapa de jugador Francisco empezó su carrera en los banquillos en el Almería, si ciudad. Era la temporada 2013-14 con Javier Aguirre al mando de los blanquiazules. 0-0 y 1-2 para los de Francisco en la parte final del curso, un encuentro que levantó las críticas de los aficionados pericos al ver como el Espanyol se había dejado ir en el tramo final del campeonato, donde sumó dos puntos de los últimos 24.
En el estreno de Sergio González como entrenador del Espanyol, el curso siguiente, el resultado fue de 1-1. No hubo partido de vuelta debido al despedido del joven técnico. Se vieron las caras en la campaña 2018-19 en el camiseta sd huesca barata–nueva camiseta espanyol (0-2), primer victoria a domicilio del equipo de Joan Francesc Rubi, el único capaz de ganar al técnico almeriense. Siempre contracultural el de Vilassar. 1-1 fue el resultado de la vuelta.
Pero Francisco llevó su látigo a la máxima intensidad cuando dirigió al Girona el curso anterior en Segunda. Los gerundenses fueron junto al Rayo Vallecano los únicos conjuntos capaces de ganar los dos partidos al Espanyol. 1-2 en Cornellà-El Prat, con remontada; y 1-0 en Montilivi en un encuentro en el que los blanquiazules lanzaron hasta en 20 ocasiones por cinco del equipo local.